Los planes de pensiones privados han sido un producto financiero muy en boca durante los últimos años, ya que, con el futuro incierto de las pensiones, muchas personas jóvenes quieren asegurarse unos ahorros al final de su vida laboral y esta es una de las soluciones más recurrentes. Veamos más a fondo, qué es un plan de pensiones, qué tipos hay y algunos de los aspectos técnicos que más interesan a los ciudadanos.
¿Qué es un plan de pensiones privado?
Un plan de pensiones privado es un instrumento de ahorro a largo plazo que puede complementar a tu compensación pública de jubilación. A través de aportaciones periódicas, las cuales no tienen que ser fijas, el titular del plan de pensiones irá ahorrando una cantidad de dinero que se recuperará en el momento de su jubilación.
Entre las ventajas de los planes de pensiones privados está la de desgravarte dinero en la declaración de la renta u obtener beneficios en función del capital que estés invirtiendo a través de una entidad gestora.
A continuación, vamos a ver algunas de las características de los tipos de planes de pensiones.
Tipos de planes de pensiones
En función de quién promueve los planes de pensiones, hay de unos tipos u otros. Además, podremos encontrar otros tipos de planes en función de la aseguradora o entidad con la que lo contratemos, ya que cada una tiene sus productos propios.
Según quién promueva un plan de pensiones, este puede ser: individual, asociado o de empleo. Aquí tenemos sus diferencias:
Plan individual
El plan de pensiones individual es el más habitual de todos. Cualquier persona particular puede contratarlo en una aseguradora o entidad financiera por su propia iniciativa.
- La entidad es la que se encargará de gestionar nuestro capital, el cual se devolverá en el momento de la jubilación, ya sea en forma de paga periódica o todo junto.
- Dependiendo del riesgo que quieras asumir con tus fondos de pensiones privados y del tiempo que quede hasta tu jubilación, tendrás un perfil conservador, con menos riesgos y más moderado, un perfil más agresivo, donde correrás más riesgos para buscar la máxima rentabilidad o un tendrás un perfil mixto entre ambas opciones.