Cláusula suelo en hipotecas: cómo detectar si mi préstamo la tiene
Por si hay quien no tiene aún muy claro qué es cláusula suelo en una hipoteca, se puede resumir en que es una condición que aparece en los préstamos hipotecarios, por la cual se establece un interés que nunca será inferior a un determinado porcentaje. Esto significa que por mucho que las tasas de interés del mercado bajen, el interés que pagarás en tu hipoteca no disminuirá por debajo de ese nivel establecido por la cláusula suelo.
Por ejemplo, si la cláusula suelo está estipulada en un interés del 3,90%, aunque el Euríbor bajase del 3,90%, como deudor no te podrías beneficiar de esa disminución.
Teniendo en cuenta esto, ¿cómo puedo saber si mi hipoteca tiene cláusula suelo? Hay varias formas de averiguarlo.
Escritura del préstamo hipotecario
La forma más directa de determinar si tienes una cláusula suelo en tu hipoteca es revisando la escritura del préstamo hipotecario (la del préstamo, no las escrituras de compra-venta).
La escritura de préstamo hipotecario es aquel documento que se firma ante notario cuando el banco concede la hipoteca. Este documento detallará todas las condiciones de la hipoteca, incluidas las cláusulas que establecen los límites mínimos de interés.
Consulta con tu entidad financiera
Si no encuentras las escrituras del préstamo, otra opción es contactar directamente con tu banco o entidad financiera, que tiene la obligación de facilitártelas. Puedes solicitar una copia del contrato de hipoteca y, de paso, pedir asesoramiento sobre la presencia de cláusulas suelo en el mismo.
También puedes solicitar una copia de estos documentos en la notaría donde los firmaste.
Recibos de pago
Otra forma para saber cómo detectar la cláusula suelo en mi hipoteca es a través de los recibos de pago del préstamo hipotecario. Estos pueden dar pistas si observamos que hay un límite mínimo establecido en los pagos mensuales, incluso cuando los tipos de interés estén por debajo de ese límite.
Si notas que tus cuotas no bajan incluso en períodos de tipos de interés muy bajos, es posible que tengas una cláusula suelo.
Asesoramiento legal
Si tienes dudas o sospechas de que tu hipoteca incluye una cláusula suelo, pero no tienes claro cómo detectarla, es recomendable buscar asesoramiento legal especializado.
Un abogado con experiencia en derecho bancario podrá revisar tu contrato hipotecario y brindarte orientación sobre tus derechos y las opciones disponibles.
De hecho, te lo adelantamos: puede ser complicado detectar esta disposición. La razón es que las entidades bancarias no utilizarán en la escritura del préstamo hipotecario el término “cláusula suelo”, sino que esta aparecerá con otras denominaciones.
Cómo aparece la cláusula suelo en la hipoteca
Para saber cómo detectar la cláusula suelo en mi hipoteca, hay que tener claro que no se emplearán esas palabras, por lo que no las busques en los textos. Normalmente, se utilizan otras denominaciones, tales como:
- Interés mínimo.
- Límite de interés.
- Límite de variabilidad.
- Límites a la aplicación del interés variable.
- Porcentaje mínimo establecido.
- Túnel de interés.
- Horquilla de interés.
- Interés nominal anual mínimo.
Estos términos u otros similares pueden aparecer en algún párrafo o título de epígrafe en el que se indique que el tipo de interés no podrá ser inferior a “X” porcentaje, u otra expresión similar. En cualquiera de los casos, se estarán refiriendo a lo que conocemos como cláusula suelo.
Cláusula suelo y techo en hipoteca
Además de la cláusula suelo en hipotecas, puede existir también un límite techo. En caso de que haya cláusula suelo y techo en tu hipoteca, eso significará que hay fijado un tipo aplicable al devengo de los intereses que no podrá ser superior a un determinado porcentaje (techo) ni inferior a otro porcentaje concreto (suelo).
De esta manera, un ejemplo de cláusula suelo en hipoteca que también tiene techo, se expresaría en un texto similar a:
“El tipo aplicable al devengo de los intereses ordinarios no podrá ser, en ningún caso, superior al 18%, ni inferior al 3,9% nominal anual”.
Eso significa que por mucho que cambie el Euríbor y baje mucho, el deudor siempre pagará un mínimo de 3,90% de intereses.