¿Qué son los gastos deducibles para autónomos?
Antes de empezar a enumerar todos los gastos que puede deducir un autónomo, es importante que sepas qué es un gasto deducible. Se entiende como gastos deducibles a aquellos que Hacienda te permite descontar para calcular los beneficios totales de tu actividad.
El IRPF, es un impuesto que se paga sobre los beneficios generados, es decir, ingresos menos gastos. Esto significa que, cuanto mayores sean tus gastos, menores serán tus beneficios y, por tanto, menor el IRPF que tendrás que pagar.
En resumen, los gastos deducibles son aquellos que te permitirán reducir el IRPF que tienes que pagar.
¿Qué gastos puedo deducir como autónomo?
Probablemente, esta sea la pregunta del millón. Mucha gente conoce lo que es un gasto deducible, pero desconocen todos los que existen. Por supuesto, no todos los gastos que hagas siendo autónomo son deducibles, es necesario que cumplan ciertos criterios.
- Gastos vinculados a la actividad. Para que un gasto pueda ser deducible, es fundamental que esté relacionado con la actividad con la que el trabajador está dado de alta como autónomo.
- Deben ser gastos justificados. No sirve con decir que has gastado una cantidad de dinero en algo relacionado con tu actividad. Es necesario que presentes facturas de dichos gastos para que puedan deducirse.
El segundo punto es completamente lógico, pero el primero es el que tiene algo de “subjetividad” y si estás buscando formas de cómo ahorrar siendo autónomo, deducir la mayor cantidad de gastos posible es una de ellas.
Lista de 12 gastos que puede deducirse un autónomo
Dejando a un lado la subjetividad de que gastos pueden deducirse y cuáles no, en base a tu actividad, Hacienda trata de controlar esto de forma bastante firme. Es por esto que hay una lista de todos los tipos de gastos que puede deducir un autónomo. Esta lista puede cambiar con el tiempo, por ello, queremos dejar claro que, los que se listan a continuación, son los gastos deducibles para autónomos en la actualidad.
- Sueldos y salarios de tus trabajadores. Si eres un autónomo con trabajadores a tu cargo, podrás deducir los salarios de los mismos. En este apartado se incluyen salarios, pagas extraordinarias, dietas e indemnizaciones.
- Cuota de autónomos. La cuota de autónomos es un gasto deducible. Todos los autónomos tienen que pagar una cuota todos los meses para poder ejercer. Como la cuota es necesaria para poder realizar la actividad, es un gasto deducible.
- Consumos de explotación. Todas las compras que sean necesarias para la realización de la actividad, también son deducibles. Para calcular los consumos de explotación, basta con restas las existencias finales a las existencias iniciales y sumar las compras.
- Arrendamientos. Para el desempeño de muchas actividades es necesario alquilar locales y, por supuesto, este es un gasto deducible para los autónomos. Se incluyen alquileres, cánones y “leasing”, de todo aquello necesario para el desempeño de la actividad.
- Suministros domésticos. Estos son gastos deducibles clave para autónomos que trabajan en casa. Cada vez es más popular el trabajo desde casa, gracias a los avances de Internet. En estos casos, el autónomo podrá deducirse el 30% de los suministros de agua y luz de la parte proporcional de la vivienda que este dedica a la realización de la actividad.
- Gastos por dietas de manutención. En caso de que la actividad realizada implique estar fuera de casa durante más de 24 horas, el autónomo podrá deducirse 26,67€ diarios en España y 48€ si es en el extranjero, siempre que no pernocte. En caso de que tengas que pasar la noche fuera, podrá deducirse 53,34€ en España y 91,35€ en el extranjero.
- Gastos de mantenimiento y reparaciones. Siempre que el material, herramientas o maquinaria utilizada para tu actividad, requiera reparación, puede ser deducida del IRPF. No se incluyen los gastos de mejora o ampliación.
- Tributos fiscales deducibles. Hay ciertos impuestos en España, como el IBI o el IAE, que pueden ser deducidos del IRPF.
- IVA soportado. Hay muchos autónomos, ya sea por su actividad o por su situación, que no hacen declaraciones trimestrales de IVA. En estos casos el IVA soportado es un gasto deducible para autónomos.
- Gastos financieros. Todos los intereses y gastos relacionados con préstamos y créditos o recargos, pueden deducirse del IRPF.
- Amortizaciones. Ciertos productos de larga duración, pierden su valor con el paso del tiempo. Las amortizaciones no son más que la expresión monetaria del valor que pierden los bienes con el paso del tiempo. Hacienda tiene unas tablas, muy bien definidas, que te permitirán calcular lo que podrás deducir en término de amortizaciones y sobre que bienes podrás hacerlo.
- Seguros. Una ventaja que tiene ser autónomo, es que podrás deducir del IRPF la cuota de diferentes seguros. Por ejemplo, en el caso del seguro de vida, la deducción máxima es de 500€ por persona al año. En caso de que el autónomo en cuestión tenga una discapacidad, el límite asciende a 1.500€. Solo si eres autónomo, podrás deducirte de la póliza de vida.