Qué es un presupuesto familiar
La compra semanal de comida, las facturas, las extraescolares… Los gastos que hay en una familia no son pocos, suelen ser muy variados y, aunque la mayoría son fijos, puede haber imprevistos que vacíen el bolsillo más de lo que quisiéramos.
Es por ello por lo que un presupuesto familiar es la herramienta perfecta para llevar un control de la situación financiera y económica de un hogar. Y es que, controlar los ingresos y pagos por periodos contribuye a detectar y evitar gastos hormiga con más facilidad, teniendo el dinero suficiente para cualquier actividad o proyecto personal prioritario, como puede ser la adquisición de un inmueble.
Ventajas de elaborar un presupuesto para la familia
Elaborar un presupuesto e intentar llevarlo a cabo permitirá a cualquier familia conseguir diferentes objetivos económicos, como puede ser cambiar el coche, ir a otro país de vacaciones, invertir en productos de ahorro para la jubilación o mejorar el sistema de aire acondicionado de casa, por ejemplo.
Además, otro de los aspectos positivos de hacer un presupuesto de este tipo es que permite aprender a tomar decisiones económicas para poder vivir sin tantas preocupaciones a nivel financiero. De esta manera, permite no endeudarse más de la cuenta, llegar a fin de mes con mayor desahogo y tener un colchón económico para el futuro o para cualquier imprevisto que pueda surgir a corto plazo.
Cómo elaborar un presupuesto para familias
Antes de adentrarse en la elaboración de un presupuesto para familias, es necesario hacer uso de diferentes recursos físicos y herramientas digitales que faciliten su diseño. Puede servir un extracto bancario del mes, tickets de compra si pagas en efectivo, el listado de movimientos de gastos fijos o deudas, así como un documento Excel donde ir controlando y apuntando todas las cantidades.
En este documento (sea Excel u otro) empezarás a incluir cualquier movimiento económico, incluidos aquellos más pequeños, como un café en el bar de debajo de casa, por ejemplo.
A partir de ello, tendrás que elaborar distintos apartados:
- Ingresos: salarios, extras, ingresos de ahorro e inversiones, prestaciones, ayudas o ventas domésticas como por ejemplo las que se hacen de artículos de segunda mano.
- Gastos fijos: suministros como la luz, agua y gas, comida, seguro del hogar o del coche y otros gastos previsibles como el IBI o tasas de basura, entre otros.
- Gastos variables imprescindibles: También conocidos como los imprevistos. Reparar un electrodoméstico, reparar el coche y cambiar ruedas, cita de urgencia en el dentista o pagar una multa son algunos de estos tipos de gastos.
- Gastos superfluos: Hacen referencia a los gastos hormiga como las compras compulsivas de ropa que ya tienes, desayuno y café diario fuera de casa, suscripción a todas las plataformas de contenidos posibles o productos de cuidado personal de gama más alta, por ejemplo.
- Partida destinada al ahorro e inversión: Qué porcentaje de nuestros ingresos queremos destinar a esta parte o cuánto dinero en total para poder alcanzar la independencia financiera tanto deseas.
Como puedes intuir, la elaboración mensual de este documento permite tomar conciencia de todo lo que se gasta en la familia para empezar a trabajar en aquellos gastos prescindibles y no prioritarios que supondrán un ahorro para todos.
Presupuesto familiar: ejemplo
Para visualizarlo y estudiarlo mejor, os dejamos con un ejemplo de presupuesto familiar donde se puede observar la suma de los ingresos y de los gastos, así como el resultado de restar ambos, obteniendo así un balance: