Cómo funcionan las coberturas de un seguro de vida
Al igual que en otro tipo de seguros, en las pólizas de vida hay unas coberturas incluidas y otras adicionales o complementarias, lo que hacen que el seguro sea más completo y personalizado, así como su precio sea mayor.
Ahora bien, según la compañía de seguros, las coberturas incluidas y adicionales variarán. Por ejemplo, unas pueden incluir gastos de sepelio, mientras que otras lo ofrecen como cobertura adicional.
En todo caso, en los seguros de vida la cobertura por siempre fallecimiento viene incluida en la prima que pagas mensualmente o anualmente. Esto significa que, si tienes contratado el seguro de vida Life5 y mueres por causas naturales, enfermedad o accidente, las personas que hayas escogido como beneficiarias recibirán una indemnización.
Con el dinero recibido, podrán cubrir todos sus gastos durante varios años o incluso saldar deudas con el banco, como puede ser el pago de una hipoteca.
Como coberturas adicionales podemos encontrar la invalidez permanente absoluta (IPA). Esto significa que si la añades a tu póliza, también quedarás cubierto económicamente en caso de que quedes incapacitado para seguir trabajando. Así, aunque dejes de recibir tu sueldo, tú y los tuyos dispondréis de una cantidad de dinero para manteneros.
Otra cobertura complementaria suele ser la de gastos de sepelio. Es decir, si incluyes esta garantía, puedes solicitar el anticipo de la indemnización para pagar gastos funerarios e impuestos, sin necesidad de contar con un seguro de decesos adicional. En el caso del seguro Life5 Vida esta viene incluida junto a la de fallecimiento por cualquier causa.
Hasta qué edad cubre un seguro de vida
Cada compañía de seguros es quien establece la edad límite que dura un seguro, situándose normalmente entre los 70 y 75 años de edad máxima del tomador. Por lo tanto, una vez el asegurado alcanza esta edad, el seguro expira.
Sin embargo, es importante puntualizar que las compañías pueden establecer edades límite diferentes para cada una de las coberturas, llegando algunas incluso a extenderse hasta los 80 años.
Cómo funciona la indemnización de un seguro de vida
La indemnización que reciben los beneficiarios del seguro de vida dependerá del capital asegurado contratado por el asegurado, el cual se pacta en el contrato.
Lo recomendable es que asegures entre 5 a 10 veces tu sueldo anual. Por ejemplo, si cobras 30.000 € y crees que tu familia necesitará 7 años de protección. Multiplica el 30.000 por 7. Así, tu capital asegurado debería ser 210.000 €.
Si hay un único beneficiario, este cobrará la indemnización completa. En cambio, de haber varios, se repartirá equitativamente, salvo que el tomador haya establecido los porcentajes en el contrato. Debes tener en cuenta que, cuanto más dinero asegures, más caras serán las primas a pagar.
Sin embargo, no pienses solo en el precio de las primas, sino que también debes tener en cuenta los ingresos y gastos de tu familia. Para hacer un cálculo aproximado, multiplica tus ingresos anuales por el número de años que crees que tus seres queridos necesitarán un apoyo económico.