Estructura familiar
El número de miembros de la familia que quedarán protegidos gracias al capital del seguro de vida es algo a tener muy presente. No es lo mismo no tener hijos que tener tres, por ejemplo. Además de esto, también hay que considerar en qué etapa de la vida se encuentra cada miembro a la hora de contratación del seguro.
Esto implica pensar en su presente, pero también en el futuro. Siguiendo con el caso de los hijos, no es igual que todos sean niños pequeños en edad escolar, que si están acabando la universidad. Asegurar a los descendientes el pago de todos sus estudios es una cuestión importante que se debe contemplar al pensar en qué capital se debe asegurar en un seguro de vida.
Ingresos de la familia
Otra cuestión fundamental a la hora de calcular qué capital hay que asegurar son los ingresos de la familia y la responsabilidad del asegurado respecto a la unidad familiar. Esto es así porque no es lo mismo que sea solo el salario del asegurado el que entra en casa, que el hecho de que entren dos sueldos o más.
Reajuste de ingresos
Tras el fallecimiento de un familiar o desde el comienzo de su situación de invalidez, por ejemplo, el entorno del asegurado necesitará un tiempo de adaptación hasta recuperar cierta normalidad y estabilidad económica.
Los expertos señalan que dicho tiempo suele rondar entre los 3 y los 5 años. Los gastos que se puedan generar durante ese periodo deberían estar contemplados dentro del capital asegurado del seguro de vida.
Hipoteca
Si el asegurado es quien está pagando la hipoteca de su hogar, lo ideal es añadir la cuantía que falte por abonar al capital. De esa manera, si el beneficiario quedase a cargo de la casa, no tendría que hacer frente a ese pago. En este caso también puedes contratar un seguro de vida para hipoteca, dirigido expresamente a pagar la deuda pendiente con la entidad bancaria.
Deudas y créditos pendientes
Cualquier tipo de deuda o de crédito pendiente que exista (un préstamo para pagar un coche, por ejemplo) debería considerarse también en el capital. Si el objetivo de la indemnización es proteger a los familiares, que no tengan que preocuparse por deudas es básico.
En definitiva, a la hora de calcular el capital para el seguro de vida, habrá que hacer un estudio analizando los ingresos actuales que aporta el asegurado y los gastos futuros que sobrevendrán a los beneficiarios.
Expuesto lo anterior, cabe recordar que uno de los condicionantes que suben la prima a pagar por el seguro de vida, es el capital asegurado.
Por ello, cuanto más alto sea este, más alta será la indemnización que recibirá el beneficiario, pero, consecuentemente, la prima también será más elevada. Además, hay que tener en cuenta que existe una subida anual de los seguros de vida que irá encareciéndola un poco año tras año.
Sin embargo, aunque está bien conocer estos detalles sobre las primas, no es aconsejable establecer un capital muy pequeño para el seguro de vida con tal de pagar menos, puesto que las consecuencias de ese acto las sufrirán los beneficiarios de la póliza.
¿Cuál es el capital mínimo que se puede asegurar en un seguro de vida?
No se puede responder con exactitud y de forma general cuál es el capital mínimo que una persona puede asegurar para su seguro de vida, ya que cada aseguradora establecerá su mínimo y máximo dentro de su normativa.
Por ese motivo, lo recomendable es tener claro el capital a la hora de buscar el mejor seguro de vida, puesto que si la cantidad a asegurar es muy baja, quizás no todos los seguros se adapten a ti.
¿Puedo asegurar el capital que yo quiera?
En tu póliza del seguro de vida podrás asegurar el capital que desees, siempre y cuando te ajustes a las normas de la aseguradora. Es decir, si esta ha marcado un mínimo y/o máximo a asegurar, podrás establecer el capital que quieras dentro de esos márgenes.
En caso de que no existan límites marcados por parte de la compañía, el capital del seguro de vida será el que quieras. Sin embargo, cuando la cantidad es muy elevada, la aseguradora puede pedirte una justificación del mismo, pues no querrá asumir el riesgo si no existe ninguna razón válida para querer contratar tal capital.
Lo habitual es que en esos casos se solicite al asegurado un informe financiero y de solvencia. Normalmente esto sucede cuando el capital que quiere asegurar dentro de su seguro de vida es superior a 500.000 €. No es el caso de la póliza de Life5.
¿Podría estar sobreasegurado con mi seguro de vida?
Dado que el valor de una vida humana es incalculable, es imposible decir que se puede estar sobreasegurado con las pólizas de los seguros de vida. Eso significaría estar asegurando un capital superior al que puedan necesitar los beneficiarios en caso de que el asegurado fallezca y eso nunca se va a saber con exactitud.
Sí, es posible calcular unos gastos o valorar la situación financiera y patrimonial de una persona, pero no todo aquello que surgirá tras su fallecimiento o como consecuencia del mismo. Por ello, los conceptos de “sobreseguro” o “infraseguro” solo se pueden aplicar a seguros de daños y no a personas.
Seguro de vida: doble capital
Una opción ofrecida por muchas compañías de seguros de vida es el doble capital. Esta garantía permite que tu beneficiario cobre el doble de indemnización si tu fallecimiento se produce a causa de un accidente, habitualmente de tráfico.
De esta manera, tus seres queridos se encontraran mucho más protegidos, pero como consecuencia, al tratarse de una garantía complementaria, el precio de las primas que debes pagar será mayor.