Diferencia entre heredero y beneficiario en un seguro de vida
Es importante aclarar que no es lo mismo hablar de herederos que de beneficiarios de un seguro de vida.
Los beneficiarios de un seguro de vida serán aquellas personas designadas como tal por el tomador del seguro para cobrar la indemnización. Estas pueden coincidir o no con los herederos legales del asegurado, puesto que un beneficiario asignado puede ser una persona completamente ajena a la familia.
Para que herederos y beneficiarios coincidan se debe dar uno de estos supuestos:
- Que las personas designadas como beneficiarias de una póliza coincidan sean los herederos legales.
- Que no se hayan asignado beneficiarios, no existan reglas sobre su asignación y, por lo tanto, atendiendo a la Ley de Contrato del Seguro, el capital pase a formar parte de una herencia.
En conclusión, desde el momento en el que se designa un beneficiario o existe una regla de designación, aquellos herederos no señalados como beneficiarios de un seguro de vida no cobrarían este ni podrían reclamarlo.
Cómo cobrar un seguro de vida sin beneficiario
Un seguro de vida sin beneficiario no es un seguro cuyo cobro no se vaya a realizar. Como se ha visto, si no hay una designación expresa o genérica de beneficiarios, se seguirán las normas establecidas.
Si se llega al punto de que el capital del seguro pasa a formar parte del patrimonio del tomador, el seguro de vida se cobrará por parte de los herederos mediante la herencia, tal y como se estipule en el testamento. Eso sí, para ello se deberá haber liquidado el Impuesto de Sucesiones y presentar la designación de herederos ante un notario.
Sin embargo, si no es necesario llegar a este paso, puesto que existe hijos, padres o cónyuge que puedan cobrar el seguro, serán estos los encargados de solicitarlo.
Pasos para cobrar el seguro de vida sin beneficiario
Para empezar, lo ideal es que, ante la existencia de un seguro de vida, el asegurado informe de este hecho a sus familiares más cercanos, especialmente si son beneficiarios. De esta forma, el primer paso para cobrar la indemnización será comunicar el fallecimiento a la compañía aseguradora en un máximo de 7 días si quieren reclamar la indemnización.
Aun así, la realidad es que a veces los familiares de una persona fallecida desconocen si esta contaba con un seguro de vida y, por ende, tampoco saben si tendrían derecho a cobrar el capital asegurado.
Cómo saber quién es el beneficiario de un seguro de vida
Para solucionar estas dudas existe el Registro de Seguros de Vida, entidad que recoge esta información y a la que se puede solicitar el Certificado del Seguro de Fallecimiento. Este es el documento legal que indica si un fallecido contaba con una póliza de este tipo.
Sin embargo, dicho certificado no determina quiénes son los beneficiarios de una póliza. Por ello, se deberá acudir con el mismo a la aseguradora, la cual sí que aparecerá reflejada, para confirmar si se es el beneficiario de la póliza.
Esto es muy importante, pues la compañía aseguradora solo procederá al pago de la indemnización si el beneficiario reclama el cobro y, para ello, evidentemente, el beneficiario debe tener constancia de que lo es.
A partir de ahí, para cobrar un seguro de vida, habrá que realizar la notificación correspondiente a la propia aseguradora y presentar la documentación necesaria.
¿Quién cobra un seguro de vida si el beneficiario ha fallecido?
Lo recomendable siempre es designar a más de un beneficiario, como mínimo a dos. De esta manera, si uno falleciese, el otro cobraría el capital asegurado completo.
Sin embargo, imaginemos que se desconocía la existencia de un seguro de vida, se confirma que así era y resulta que el beneficiario ya no vive. En ese caso, ¿quién cobra un seguro de vida sin beneficiario, puesto que este ha fallecido?
Si se diese esa realidad, los derechos volverían al tomador y este podría elegir a otro beneficiario.
Quién cobra un seguro de vida si asegurado y beneficiario fallecen a la vez
Supongamos que tomador y asegurado es la misma persona y esta fallece a la vez que el beneficiario de su seguro de vida. En esos casos, el capital iría a parar al patrimonio de la persona asegurada y serían sus herederos quienes lo cobrarían por herencia.
Si contratas un seguro de vida, lo ideal es que en ese mismo instante ya pienses en aquellas personas que pueden ser beneficiarias del mismo. Además, con Life5 la contratación es tan sencilla y contarás con tanta ayuda que no te tendrás que preocupar por mucho más. Si tienes dudas, contacta con un experto en seguros de vida.